Ayuda a cuidar tu piel de las agresiones del sol
El verano suele ser un buen momento para descansar, bajar el ritmo y reconectar. Sin embargo, con mucha frecuencia, nos encontramos corriendo de un sitio para otro, visitando museos e iglesias con horarios apretados, organizando las agendas para ir a la playa o preparando el picnic para un pasar un día en la montaña. Sin darnos cuenta, vamos dejando de lado los mimos y cuidados, que con la rutina diaria, dispensábamos a nuestra piel. Como resultado, cuando regresamos a casa de vacaciones, nuestra piel suele estar muy necesitada de hidratación.
Para el cuidado de nuestro órgano más extenso, es imprescindible cuidar lo que comemos. Nuestra piel necesita de nutrientes que llegan continuamente por los pequeños capilares, por lo que una buena circulación será también indispensable.
Hay algunos alimentos que sería conveniente evitar si tu piel está reseca y apagada. Por un lado, el alcohol y el café deshidratan enormemente la piel, y por otro, los alimentos muy secos como las tostadas u horneados, así como las preparaciones sin agua, también tienden a producir sequedad.
Hay otros, que por sus cualidades hidratantes, son muy interesantes tenerlos siempre a mano:
1. ALIMENTOS RICOS EN OMEGA 6
Son muy indicados en problemas de piel seca. Las semillas de sésamo y de girasol, las nueces, los cereales, las legumbres y el aguacate son ricos en éste ácido graso y puedes introducirlos en tu dieta fácilmente.
Incluye también alimentos ricos en Omega 3 para un equilibrio adecuado: semillas de lino, pipas de calabaza o almendras pueden formar parte de tu desayuno diario y aderezar tus ensaladas y salteados de verduras. Como tentempié también son una opción saludable.
2. ALIMENTOS RICOS EN VITAMINA E
Por un lado, mejoran la absorción de Omega 6 y Omega 3 y, además, ayudan a restaurar la humedad de la piel. La vitamina E tiene un gran efecto antioxidante, que protege contra el envejecimiento y beneficia nuestro sistema circulatorio, ayudando a una correcta distribución de nutrientes.
Los aceites vegetales son una de las mejores fuentes de esta vitamina: en tus comidas no te olvides de utilizar aceite de sésamo y de oliva virgen extra de extracción en frío. También puedes incorporar 1 o 2 cucharadas soperas de germen trigo a tus ensaladas o cremas.
Como aplicación externa, el aceite de germen de trigo de Argital es uno de los más nutritivos y el de sésamo evita la deshidratación y previene la flacidez por sus propiedades re-estructurantes. El de almendra, jojoba o incluso el de oliva, o bien una combinación de éstos ayudarán también a hidratar y regenerar tu piel.
Las verduras de hojas verdes, los productos derivados de la soja, y algunos cereales como el amaranto o la cebada, son también ricos en esta vitamina. Un puñado al día de almendras o 1 o 2 cucharadas soperas de semillas como las de sésamo o girasol también ayudarán a mantener tu piel hidratada.
3. ALIMENTOS RICOS EN VITAMINA A
Esta vitamina ayuda a prevenir la sequedad, las arrugas y por tanto el envejecimiento de nuestra piel. Cuando hay deficiencias, suele producirse un exceso de descamación y picazón.
Seguro que ya sabes que los alimentos de color anaranjado como la calabaza, la zanahoria o los albaricoques son ricos en carotenos y, por tanto, precursores de esta vitamina, pero quizá te sorprenda conocer que el alga nori es uno de los alimentos más ricos en vitamina A. Puedes encontrar más información sobre esta alga y sus usos en el artículo publicado el 8 de junio en nuestra sección de noticias.
Como ves, mantener una piel hidratada y saludable no es tan difícil. Si te aseguras de incluir estos alimentos en tu dieta, comenzarás a notar cómo tu piel recobra hidratación y luce más sana, día a día. Pero si además quieres nutrirla por fuera, elige siempre cremas nutritivas elaboradas con productos naturales, sin conservantes ni parabenes.
Para tu cara, puedes elegir entre una buena crema hidratante y nutritiva a base de aceites y germen de trigo como la crema hidratante y nutritiva de Argital, o una rica en vitamina E y aceites como la crema antiarrugas de la misma marca. Y si el sol ha hecho estragos en tu piel, una crema hipernutritiva a base de karité puede ser la mejor solución. El karité es un excelente regenerador celular, que hidrata en profundidad y calma las pieles irritadas.
Para tu cuerpo, que seguramente estará sediento de hidratación después de las exposiciones al sol, puedes elegir algún aceite rico en vitamina E como los sugeridos, o un aceite emoliente para después de la exposición solar. Si prefieres una textura más fresca y cremosa, una opción muy interesante es una buena crema fluida corporal, que puedes aplicar masajeando cuidadosamente tu cuerpo, sin olvidarte de tus pies, que a estas alturas del verano, ¡estarán deseosos de cariño!
Publicado en:
Piel y belleza