5 beneficios del tempeh que no sabías
Cada vez son más las personas que optan por seguir una alimentación vegana. Esta elección, bien planificada, te aportará todos los nutrientes que necesitas y te ayudará a mantener y mejorar tu salud.
La proteína suele ser el nutriente que más preocupa cuando eliges dejar de comer productos de origen animal. Sin embargo, nuestras necesidades proteicas no son tan altas como habitualmente pensamos. La EFSA (European Food Safety Authority) habla de 0,83 gramos por kilo de peso y día para adultos. Es decir, una persona de 70 kilos de peso necesitaría tomar menos de 70 gramos de proteína al día.
En una alimentación variada, hay muchos alimentos de consumo diario que contienen proteína. Las legumbres, cereales y frutos secos son las mejores fuentes de proteína vegetal, pero también las verduras la contienen, por lo que es muy raro que se den carencias.
Nuestro organismo es capaz de almacenar los aminoácidos procedentes de las proteínas ingerimos y utilizarlos luego a medida que los va necesitando.
Algunas fuentes vegetales, nos aportan además proteínas completas o de alto valor biológico, es decir, que tienen todos aminoácidos esenciales en su composición y en una cantidad suficiente para fabricar nuestra “propia proteína”.
La soja, los garbanzos, algunos tipos de alubias, así como la quinoa y el amaranto, o algunos frutos secos como los pistachos y semillas como la de cáñamo, son fuentes de proteínas completas de calidad.
Los derivados de estos alimentos como el tofu, el tempeh o el natto son también ricos en proteínas. Hoy te presentamos el tempeh, para que conozcas todos sus beneficios para tu salud.
El tempeh es un alimentado de soja fermentada originario de Indonesia. Ya en el siglo XII había cultivos de soja en Java y parece que su descubrimiento fue accidental. Un residuo de soja que se había descartado durante la fabricación de tofu, atrapó esporas que produjeron el hongo blanquecino característico que recubre al tempeh, descubriendo al probarlo, que era comestible.
Actualmente, es uno de los alimentos más consumido en ese país, y es muy habitual que se prepare en casa. Su elaboración se hace por un proceso de fermentación controlada a partir del grano de soja y del hongo Rhizopus.
También en nuestro país el tempeh se está haciendo cada vez más popular gracias a los muchos beneficios que aporta para nuestra salud además de ser un alimento rico en proteínas.
1.- Fuente de probióticos:
El tempeh es un alimento fermentado y por tanto, fuente de probióticos para nuestros intestinos.
Los probioticos actúan instalando bacterias beneficiosas para nuestros intestinos que ayudan a controlar las bacterias llamadas “malas” y contribuyen a una mejora de nuestra microbiota y de nuestro sistema inmune.
2.- Reduce el colesterol:
Las isoflavonas de la soja, que podemos encontrar también en el tempeh ayudan a reducir los niveles de colesterol LDL, así como el colesterol total.
Además, el tempeh es rico en Niacina. Esta vitamina (B3) es conocida por ayudar a elevar los niveles de colesterol “bueno” HDL y reducir los triglicéridos y el colesterol “malo”. El resultado es una reducción del riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares asociadas a un exceso de colesterol en sangre.
3.- Aumenta la densidad ósea:
El tempeh es un alimento rico en calcio y magnesio, indispensables para el mantenimiento de unos huesos fuertes.
Otro mineral presente en el tempeh es el cobre. Este oligoelemento también juega un papel interesante en el crecimiento de los huesos. Además de ayudar a la salud de los tejidos conectivos, una deficiencia de cobre se asocia con una mayor fragilidad de los huesos. Estudios realizados en la Universidad de Akron, Ohio, sugieren que el consumo de cobre aumenta el porcentaje de recuperación de fracturas óseas.
4.- Ayuda para la diabetes:
El tempeh contiene el 65% de la cantidad recomendada de manganeso. Se ha observado que los diabéticos tienen niveles más bajos de lo habitual de este oligoelemento.
El manganeso interviene en el aprovechamiento de la insulina, ayudando a regular los niveles de glucosa en sangre.
5.- Ayuda en la prevención y desarrollo del cáncer:
La angiogénesis es un proceso fisiológico mediante el cual se crean nuevos vasos sanguíneos a partir de otros ya existentes. Este proceso que es completamente normal y vital para nuestro crecimiento, interviene también en el desarrollo de procesos tumorales.
Según numerosos estudios, las isoflavonas de la soja presentes también en el tempeh, especialmente la genisteína y la daidzeína parecen dificultar la angiogénesis, reduciendo así el crecimiento tumoral.
Escrito por Isabel Moreno