Equilibrar el organismo de forma saludable
Equilibrar el peso de forma saludable no se refiere en ningún momento a un canon estético que responde a un mundo agresivo donde se busca satisfacer una imagen que crea esclavitud y está desconectada de nuestra realidad.
Cada cuerpo tiene una estructura ósea y a su vez una estructura muscular, lo que determina tu constitución. El peso será adecuado a esa estructura, hay personas con una estructura más ancha, otras con una estructura más estrecha y en cada caso es perfecto, no existe una mejor que la otra.
La idea de tener una figura que se ajuste al marketing que se nos vende en medios publicitarios puede llevar a desórdenes del apetito como anorexia y bulimia. Las dietas extremas o la famosa operación bikini donde la neura de perder mucho peso en poco tiempo desencadena graves problemas de comportamiento, emocionales y orgánicos.
Sin embargo, hay factores que debemos tener en cuenta para mantenernos en buena salud. Por ejemplo, el contorno de la cintura es determinante para evitar accidentes cardiovasculares. En los hombres no debería superar 102 cm y en las mujeres 88 cm.
Al corazón ‘le pesa’ la grasa abdominal
La grasa abdominal contribuye a que la tensión suba y a tener hipertensión. La predisposición aumenta aún más con un mayor perímetro de cintura. Además, la grasa que se acumula alrededor de los órganos del abdomen libra al torrente sanguíneo hormonas como la resistina que disminuye la capacidad que tiene la insulina de convertir la glucosa en energía.
Otra de las consecuencias de almacenar demasiado tejido graso en el organismo es que aumenta el colesterol denominado ‘malo’ y eleva el riesgo coronario. Estudios demuestran que si esta grasa se almacena alrededor del estómago el riesgo es mayor.
Es igualmente peligroso tener el peso por debajo de lo que requiere la estructura ya que los órganos del cuerpo pueden sufrir daños conduciéndonos a desequilibrios hormonales, amenorrea, frigidez o descalcificación entre otras cosas.
Para mantener un peso saludable la alimentación debería ser variada, equilibrada y basada en vegetales locales, de estación y ecológicos. Por ejemplo cereales integrales en grano, legumbres, algas marinas, semillas, frutos secas, fermentos, aceites de buena calidad...
Además es muy indicado seguir el ritmo del sol para realizar tus comidas. El refranero popular dice: “desayuna como un rey, come como un príncipe y cena como un mendigo”.
Cuando alguien me pregunta por el ayuno intermitente para mi está claro que si cenas a las 19:00 h y luego desayunas entre las 8:00h y las 9:00h, entonces le darás descanso de 14 horas al organismo y no interfieres con el ritmo natural, “es un ayuno intermitente inteligente”
Otro aspecto importante para mantener el peso saludable es dormir un mínimo de 8 horas. "Dormir poco predispone a la ganancia de peso” y esto es debido a que la falta de sueño altera la regulación de la grelina y la leptina que son las hormonas que regulan el hambre y la saciedad. Cuando uno duerme poco, tiene tendencia a comer más, sobre todo picoteos y carbohidratos simples.
Hay otro aspecto que nos puede llevar al desequilibrio y es el hambre emocional. El hambre emocional es un impulso inmediato. ‘Necesito comer ya’, y ‘no me sirve cualquier alimento’, ya que lo que quiero es algo en concreto como chocolate, pan, patatas fritas, bollería industrial, alimentos grasos, dulces muy azucarados... Después de comer estos alimentos tenemos una sensación de alivio que dura unos minutos y luego queremos más.
El hambre emocional surge cuando nos sentimos con falta de amor, insatisfechos, muy estresados o hemos perdido el ritmo. Por eso intentamos llenar el vacío con este tipo de alimentos y comiendo de esta manera impulsiva.
Comer activa en nuestro cerebro las áreas relacionadas con el placer, también llamado circuito de recompensa. Este mecanismo tiene que ver con la dopamina, un neurotransmisor protagonista de la sensación de placer, y con la serotonina.
Este circuito se activa con facilidad sobre todo con los comestibles “altamente palatales”. Estos son aquellos que contienen grasas+azúcares, grasas+sal, glutamato monosódico. Todos estos están presentes en numerosas comidas envasadas, harinas refinadas, productos alimentarios con sabores intensos, potenciadores de sabor...
Cuando la constitución de la persona es muy yang —contractiva, compacta— ayunar, comer comida salada, de naturaleza muy contractiva yang y hacer un ejercicio extremo genera como consecuencia una retención de grasa en el cuerpo, un efecto en el cuerpo que es el opuesto al deseado.
Tips para eliminar del organismo grasas, sustancias desequilibradoras y bajar de peso:
1- Utiliza regularmente en tu sopa de miso setas shitake secas.
2- Incorpora el daikon seco a tus sopas o bebidas .
3- Come cada día una ración de verduras detergentes: rábanos frescos, daikon fresco, zanahoria rallada, apio, espárragos, pepinos.
4- No vayas a la cama después de cenar, espera al menos 3 horas.
5- Camina a paso rápido cada día al menos 40 minutos.
6- Evita los ayunos prolongados y las dietas extremas, no porque comas poco pierdes más peso, el cuerpo no sabe que le vas a dar comida y retendrá todo.
7- Las algas marinas, especialmente la nori y la kombu, te ayudan a descargar grasa del organismo a la vez que te mineralizan.
8- No te saltes las comidas.
9- Mastica muy bien cada bocado de comida.
10- No bebas en las comidas.
11- Come más cuscús y bulgur tienen menos grasas y el doble de fibra que otros cereales y según la macrobiótica relajan la condición.
12- Toma con regularidad té kukicha, té verde y té Mu.
13- Evita las comidas frías. Las comidas y caldos calientes activan el metabolismo.
14- El arroz rojo equilibra la glucosa y es muy adecuado para mantener el peso.
15- Practica un movimiento moderado.
16- El tofu es rico en nutrientes y cero grasas.
Tips para recuperar peso y crear riqueza orgánica:
1- Come mas cremas de verduras y alimentos cremosos.
2- Incorpora a tu alimentación el mochi.
3- Toma más avena en copos y en grano.
4- Come estofados de legumbres cremosos.
5- Incrementa el uso de aceite en cocina para salteados y tempuras.
6- Incorpora el seitán en guisos emparedados y otras preparaciones.
7- Toma un poco de pan germinado con tahin o algún otro puré de frutos secos.
8- Mastica muy bien tu comida.
9- Haz 5 comidas al día.
10- No te saltes el postre o la merienda. Prepáralos con endulzantes naturales.
11- Toma la fruta de estación a media mañana.
Bebida para eliminar grasa del organismo
Daikon seco con zanahoria
Ingredientes:
1 cucharada de daikon seco dejado a remojo
La misma cantidad de zanahoria rallada
1/2 vaso de agua
Elaboración:
1. Eliminar el agua del remojo.
2. Cocer en un vaso de agua el daikon y la zanahoria durante 10 minutos.
3. Comer y beber el caldo.
4. Tomar 3 veces por semana durante 3 semanas en ayunas.
Plato para ganar peso
Sándwich de mochi
Ingredientes:
1 pastilla de mochi
2 cortadas de seitán
1 cucharadita de pesto
Un poco de aceite
Elaboración:
1. Cortar el mochi en tres tiras.
2. Dorar el seitán en un poco de aceite.
3. Disponer el mochi en una sandwichera o gofrera hasta que se funda totalmente.
4. Doblar el mochi fundido en dos partes.
5. Untar con el pesto.
6. Rellenar con el seitán
¡Buen provecho!
Artículo escrito por Patricia Restrepo, directora del IME y consultora macrobiótica.