La menopausia y el exceso de estrógenos

La menopausia, el cese de la menstruación, tiene una correlación fisiológica con la disminución de la secreción de estrógenos por la perdida de la función folicular. El climaterio es la fase de transición entre la etapa reproductora y la no reproductora de la mujer. Durante la menopausia los ovarios dejan de producir óvulos y producen menos estrógenos y progesterona.

Podemos hablar de menopausia cuando los períodos menstruales dejan de producirse durante 12 meses. Estamos hablando de un proceso natural de la vida en el que la mujer deja de ser fértil y por lo tanto la ovulación se deja de producir y los niveles de estrógeno disminuyen. Esto provoca ciertos cambios y síntomas en el organismo que para nada son negativos, simplemente es una nueva etapa a vivir.

La menopausia es progresiva y se empieza a desarrollar alrededor de los 50 años, la producción hormonal va disminuyendo poco a poco. Existen muchas razones por las que es posible llegar antes a la menopausia, por ejemplo, el sedentarismo. La obesidad, el estrés continuo, el tabaquismo.

Según la doctora Christiane Northrup, la menopausia es el paso a los años de la sabiduría. Y pese a lo que piense una sociedad focalizada en la rentabilidad y sobreproducción, la menopausia puede ser una etapa de sosiego, plenitud y encuentro.

La mujer, es el único ser viviente que experimenta el cese de su capacidad para procrear, el resto de los animales mueren con sus cualidades reproductivas íntegras. Este parece un hecho caprichoso de la naturaleza, pero en realidad es un símbolo nítido. Sabemos que lo que nos diferencia de las demás especies o animales es la capacidad de interiorización, la autoconciencia.

Hemos dicho que en la menopausia los estrógenos bajan, sin embargo, parece una paradoja que exista el cáncer de mama por un exceso de estrógenos y que este esté en aumento durante esta etapa de la vida femenina. Los estrógenos que causan el cáncer de mama y otro cáncer de la zona reproductora no vienen de dentro del organismo, sino de fuera y la causa principal es no hacer un cambio adecuado en la alimentación y continuar comiendo alimentos de origen animal, carnes, huevos, embutidos, lácteos y muy pocos vegetales.

Todos estos alimentos saturan los diferentes filtros de eliminación del cuerpo como los riñones, intestino grueso, pulmones y el hígado que es el responsable de eliminar los estrógenos sobrantes. Otra causa también es el consumo de anticonceptivos o los tratamientos hormonales sustituticos durante la edad fértil que tienden a acumularse muy fácilmente en el organismo. Los disruptores endocrinos que contaminan el medio ambiente y están presentes en la agricultura extensiva a causa de los herbicidas químicos.

Consejos para una entrada a la menopausia más segura:

Los productos derivados de la soja siempre deben ser de origen ecológico y no crudos para que proporcionen una fuente de fitoestrógenos y ayuden a proteger del cáncer del cáncer de mama. Además, alivian las molestias típicas de esta época.

Según la Macrobiótica, durante la premenopausia y la menopausia deberíamos nutrirnos evitando carnes, ave y alimentos horneados y, en general, todos los alimentos secos y deshidratados, evitando lo muy yang y el extremo yin como son los azúcares simples y la comida procesada.

Proporciones más modestas: las proporciones en esta etapa se deberían de modificar, tomar más cantidad de verduras que de cereales y más legumbres que proteína animal También es buena idea reducir las algas y la sal y aumentar las semillas.

Desde mi experiencia personal y clínica debemos nutrir cuerpo, mente y alma. Respecto al cuerpo, una dieta macrobiótica vegana personalizada e inteligente, sumada a la práctica del movimiento orgánico consciente ( yoga, tai chi, chi kung). Nutrir el alma con meditación, estar en contacto con la naturaleza, la comprensión y reconciliación con el pasado, con lo que existe, la compasión y la gratitud hacen que vivas este periodo de la vida como un renacimiento floreciente.

Falsos mitos y verdades sobre la menopausia:

MITOS

- La menopausia no es el principio del fin.

- No se acelera el proceso de envejecimiento después de la menopausia. Lo que realmente acelera este proceso es una alimentación cárnica, salada y seca.

VERDADES:

- Si tu alimentación es adecuada no se aumenta de peso. Se aumenta de peso cuando intentas camuflar tus emociones comiendo.

- El cuerpo se adapta de forma natural a los cambios hormonales, no ingieras hormonas animales (carnes, aves, huevos, lácteos, pescados de piscifactorías).

- Hay una pérdida natural de calcio no peligrosa por la bajada de estrógenos (osteopenia natural). 

-Un ejercicio moderado al aire libre exponiendo el cuerpo al sol junto con una respiración consciente nos ayuda a metabolizar e el calcio. El calcio que se toma en forma de lácteos o de suplementos no se metaboliza adecuadamente, se acumula en articulaciones y zonas blandas. El consumo de lácteos de origen vacuno, de cabra o cualquier otro mamífero incluyendo queso, yogurt, nata o mantequilla incrementan la desmineralización y descalcificación de los huesos.

- No se pierde el deseo sexual, maduras sexualmente y sabes lo que quieres.

- Es el momento de redescubrir tu hobby y disfrutarlo, de conectar con tu verdadero sueño y realizarlo.

- Reunirse con mujeres es nutritivo y sanador.

- Es nuestra responsabilidad conocer la dimensión de la edad de la sabiduría y vivirla plenamente.

Alimentación durante la menopausia

- Las semillas de sésamo, tofu, algas hijiki, algas wakame, col verde, son fuentes naturales biodisponibles de calcio

 - La bebida vegetal de soja hervida con alga kombu, nos ayuda a combatir los sofocos.

- Las algas agar agar, también contribuyen a refrescar el cuerpo y facilitan el transito intestinal combatiendo el estreñimiento.

- El aceite de sésamo utilizado de manera tópica, nutre y embellece la piel del cuerpo.

- El bulgur y la polenta cocidos junto con a verduras, relajan.

- Deberíamos incrementar el consumo de vitamina C, el ñame es un precursor del colágeno.

- El tofu es un buen aliado para los sofocos ya que ayuda a disminuir la sensación térmica de calor.

- Es muy importante incluir el sabor dulce natural (no estamos hablando de azúcar) en tus comidas ya que ayuda a relajar.

- El sabor agridulce tonifica las funciones hepáticas y beneficia el aparato reproductor de la mujer.

RECETA 1: 

Bebida de soja con alga kombu

Receta para combatir los sofocos.

Ingredientes:

• 1 litro de bebida de soja de origen ecológico
• 1 tira de 5 cm de alga kombu

Elaboración:

1. Hervir la bebida de soja con el alga kombu durante unos 5 minutos.

2. Bajar el fuego y seguir cocinando hasta que el líquido se reduzca a la mitad.

3. Guarda en la nevera y toma un vasito diario.

RECETA 2: 

Crema de calabaza agridulce

Suaviza, relaja y tonifica

Ingredientes:

• 200 gramos de calabaza
• ½ litro de zumo de manzana
• 3 cucharadas de melaza de cebada
• 1 cucharada de kuzu
• Pizca de sal

Elaboración:

1. Corta la calabaza en lonchas finas.

2. Cuece a fuego lento en el zumo de manzana y una pizca de sal.

3. Cuando la calabaza esté blanda disuelve el kuzu en un poco de zumo de manzana frío para evitar grumos.

4. Remueve constantemente hasta que el kuzu se disuelva.

5. Tritura

6. Sirve con melaza de cebada y ralladura de naranja

Empieza una nueva etapa en tu vida, pero eso no siempre es malo. Disfruta de este momento.

Artículo escrito por Patricia Restrepo, directora del Instituto de Macrobiótica de España.